viernes, 27 de agosto de 2010

El arte de la discapacidad: El peor profesor del mundo.

El arte de la discapacidad: El peor profesor del mundo.: "Hace aproximadamente 5 años en mi colegio había una profesora no tan querida por los estudiantes, no solo por la materia que dictaba sino po..."

El peor profesor del mundo.

Hace aproximadamente 5 años en mi colegio había una profesora no tan querida por los estudiantes, no solo por la materia que dictaba sino por todo lo que ella era, nos "enseñaba" matemáticas.
 Esta profesora era terriblemente mala en todo el sentido de la palabra, ella era inteligente claro está pero no tenía la suficiente vocación para trabajar con niños y adolescentes y mucho menos una buena práctica para hacerse entender.
Su nombre lo recuerdo muy bien pero sólo voy a hablar de su aspecto, ella era un poco despeinada y desordenada, usaba una ropa muy extraña y la combinaba un poco extraño también, era furiosa y no dejaba que nadie le preguntara nada porque nos ridiculizaba como si fuéramos un montón de burros tratando de comprender las matemáticas que ella sabía tanto y no compartía bien, su forma de dictar la materia no era la mejor, ya que ella se pegaba la tablero a escribir y escribir y escribir y escribir números uno detrás de otros y hacer infinitos procedimientos que solo ella sabía de donde salían, es decir, a parte de que nadie la escuchaba ya que le hablaba al tablero, nadie pero absolutamente nadie y sin exagerar comprendía los procedimientos y operaciones que entre dientes  trataba de explicar.
Esta hora de clase en realidad era tan aburrida que se convirtió en la peor hora de clase del universo y la peor materia que unas pobres niñas de décimo grado podían ver, en realidad esta es la hora que me pregunto cómo pasé trigonométrica y como logré comprender un poco con ayuda de todo el mundo menos de mi particular profesora de matemáticas, gracias a Dios a la vida al derecho a la educación o al rezo de todas las niñas de la clase la profesora la cambiaron de colegio y en undécimo grado con cálculo ya era un profesor diferente, y aunque no fue pues la maravilla de nota y de entendimiento de la materia fue mucho más claro y tranquilo ver matemáticas ahora.
Igual ahora agradezco a mi desordenada profesora de matemáticas por enseñarme y mostrame todo lo que no quiero ser, es todo un modelo de profesora que no quiero seguir y cuando en algún momento vea que le hablo al tablero, que mi pelo es terrible y que nadie me entiende es el momento en que me daré cuenta que es hora de cambiar.